Ejercicio físico durante el embarazo beneficia la salud del hijo incluso en el largo plazo.
Una nueva investigación asegura que la actividad física durante el embarazo puede beneficiar la salud del hijo, inclusive hasta en la edad adulta.
Ahora, un estudio realizado en humanos confirma que el ejercicio materno durante el embarazo podría proporcionar al hijo una vida más saludable, incluso los efectos podrían verse hasta la edad adulta.
Investigadores del Departamento de Farmacología y Ciencias Nutricionales de la Universidad de Kentucky presentaron hallazgos al respecto.
Bajo el título "Ejercicio durante el embarazo y el impacto a largo plazo en la salud de los hijos".Este simposio reúne anualmente a distintos líderes científicos para discutir la fisiología del ejercicio físico en relación a cuestiones que incluyen, por ejemplo, sedentarismo, enfermedades metabólicas, patologías vinculadas al estrés, envejecimiento, enfermedades cardiovasculares, embarazo, entre otros temas.
El foco de esta investigación fue examinar los marcadores de estrés oxidativo, de la inflamación y de la sensibilidad a la insulina. El estrés oxidativo:es un daño que se produce en el cuerpo causado por la acumulación de moléculas inestables llamadas radicales libres. La acumulación de radicales libres disminuye la resistencia al estrés, aumenta el riesgo de obesidad y de patologías relacionadas con la edad.
En cambio, la reducción del estrés oxidativo puede ayudar a disminuir los riesgos de enfermedades del corazón, cáncer y diabetes tipo 2.
¿Cuánto ejercicio se debe hacer durante el embarazo?
Si una mujer que practica regularmente ejercicios, queda embarazada y decide permanecer físicamente activa, debería hacer tres cosas: consultarlo con su médico, escuchar a su cuerpo y usar el sentido común.Cuando se trata de ejercicio, más no es necesariamente mejor. De hecho, abusar del ejercicio físico puede ser contraproducente.
En lugar de un ejercicio vigoroso y de alto impacto, es mejor decantarse por una actividad aeróbica de bajo impacto y moderada intensidad. Si la mujer ya practicaba actividad aeróbica antes del embarazo, los primeros meses un trote ligero está bien. Pero en los meses posteriores, actividades como caminar o nadar son más recomendables. Pero de nuevo, es imprescindible en esta etapa consultar con su médico acerca de la cantidad, intensidad y tipo de actividad física a realizar.
conclusión: El ejercicio durante el embarazo es bueno
siempre y cuando las mujeres no abusen de su rutina y tengan en cuenta que todo en exceso es contraproducente para la salud de ellas y la de los bebés.